Miami es ese destino que siempre tengo en mente, pero por un motivo u otro siempre dejaba para más tarde. Así que, cuando me llegó al móvil el aviso de que había una oferta de vuelos muy suculenta, no me lo pensé dos veces. ¡Ya tenía el billete de avión! Ahora solo necesitaba guardar el bikini, la pamela, y cuatro cosas más. La ciudad más grande del sur de Florida me esperaba, y podría vivir en directo ese sabor cubano del que todo el mundo habla maravillas.
Ahora, ya de vuelta, puedo decir que no tenía ni idea de lo que me estaba perdiendo, si no habría ido mucho antes. ¡Me lo pasé increíble en Miami! Os voy a contar algunas de las cosas que más me llamaron la atención.
Lo primero, recorrer la ciudad en bus
Siempre que voy a una ciudad nueva, lo primero que suelo hacer es recorrerla para hacerme una idea general de cómo es. En Miami no iba a ser menos, así que tomé un bus turístico que me llevó por los lugares más emblemáticos, como South Beach o la Pequeña Habana. Mientras circulábamos por la ciudad, pude preguntar muchas cosas a la guía turística que nos acompañaba, e incluso tuve la oportunidad de hablar con otros turistas e intercambiar conocimientos. Cuando terminó el recorrido, tuve una mejor visión general y pude planificarme lo que quería ver en los próximos días.
Crucero en barco por la bahía de Biscayne
Tras haber recorrido la ciudad en bus, ahora quería hacer lo mismo en barco. Las playas de Miami son famosas en el mundo entero, y qué mejor manera de verlas que desde una lancha motora, paseando por la bahía de Biscayne (en español, bahía Vizcaína). Lo pasé en grande saltando con las olas y disfrutando del paisaje.
Cenando en Wynwood
Había sido un día muy movido, así que tenía que darme un merecido banquete de celebración. Estaba disfrutando de la ciudad, y solo era el primer día. ¡Hay que reponer fuerzas! Así que me fui al barrio de Wynwood, uno de los más coloridos de la urbe, lleno de arte callejero, vida nocturna, cultura y ambiente. Encontré muchas galerías de arte muy interesantes, pero el hambre me acabó llevando a Wynwood Diner, donde cené de lujo.
Me voy a las Bahamas
Me gusta hacer miniviajes dentro de mis viajes de placer. Es como un “2x1, llévate dos por el precio de uno”. Así que ya tenía planeada mi visita a las Bahamas. Fue un día muy provechoso, donde pude disfrutar especialmente de sus playas, además de degustar las famosas piñas coladas y frituras de caracolas de los restaurantes costeros. El ambiente era más tranquilo que el de Miami, y desde luego merece la pena ir por su gran cantidad de actividades orientadas al turismo.
South Beach
Como todavía tenía hambre de sol, ya de vuelta en Miami, decidí pasar el día en South Beach, la famosa playa que tantas veces hemos visto en el cine y en series de televisión. Y ciertamente es como sale en las pelis: glamour, elegancia, y mucho estilo. Disfruté un ratito de la costa recorriendo el paseo marítimo, y luego visité algunas las calles más emblemáticas: Lincoln Road, Española Way y Collins Avenue. No olvidé el Sur de la Quinta, más tranquila y lujosa, y también South Pointe Park. Para comer, disfruté del Joe’s Stone Crabs, y en el número 1 de Ocean Drive me puse muy loca con los mojitos del Nikki Beach, donde me divertí mucho e hice un par de amigas nuevas.
¡La verdad es que South Beach es lo mío!
La Pequeña Habana
Aunque la playa y la diversión ocupaban gran parte de mi tiempo, antes de irme no podía faltar la visita a la Pequeña Habana. Su ambiente cubano, isleño, típico, se respira en todas sus calles llenas de color y ritmo. Es como viajar a un lugar lleno de buenas sensaciones, diversión y buena vida. Y ya que estaba allí, me dediqué a saborear todo el acento cubano en platos típicos como el cortadito o la “ropa vieja”, un plato tradicional hecho de ternera desmenuzada cocinada a fuego lento con tomate, cebolla, pimienta, ajo y vino.
En definitiva, que mi viaje a Miami no solo fue mejor de lo esperado, ¡sino que estoy deseando volver lo antes posible! 100% recomendado.
Explora nuestras opciones de intercambio para Miami.
¿Interesado en planificar un intercambio? ¡Déjanos tu email y te ayudaremos!